Dónde ir
Egipto
Qué hacer en Hurgada
Hurghada combina lo mejor de las dos caras de Egipto, ya que además de las maravillas del mar Rojo también está muy bien comunicada con Lúxor y el Valle de los Reyes. Cuando te apetezca abandonar la tumbona, podrás bucear en uno de los arrecifes de coral más coloridos del planeta, realizar un safari en todoterreno por el desierto o descubrir algunos de los tesoros más importantes del mundo antiguo. Y si prefieres quedarte en la zona, echa un vistazo a los numerosos recorridos guiados por la ciudad de Hurghada y saca tiempo para visitar los baños turcos. Las seis mejores excursiones y actividades en Hurghada: 1. Participa en una visita guiada por la ciudad de Hurghada Hace relativamente poco, Hurghada era un tranquilo pueblo de pescadores. Recordarás su pasado reciente tan pronto llegues al puerto y veas la actividad incesante en el bullicioso mercado del pescado. Justo enfrente del mercado se encuentra la inmensa mezquita Al Mina. También vale la pena visitar la iglesia copta de San Shenouda. Sus relucientes formas geométricas la han convertido en uno de los lugares favoritos de los instagramers. Pero, una de las actividades más destacadas que puedes hacer en la ciudad es, sin duda alguna, ir de compras. Explora el zoco, sumérgete en su ambiente y practica el arte de regatear. Si no tienes la ocasión de visitar los lugares históricos del Nilo, acércate al Museo de Hurghada, cuya colección alberga objetos de valor incalculable de la época de los faraones. 2. Practica esnórquel o buceo en el mar Rojo Con sus coloridos arrecifes y bancos de peces arco iris, el nombre de mar Rojo se queda corto para describir la enorme gama de colores que descubrirás bajo el agua. Hay un sinfín de especies de invertebrados esperando a que las descubras. Muchas excursiones en barco van hasta el arrecife de Carless o hasta el de Abu Nuhas. Ambos son sitios ideales para practicar esnórquel y buceo. También hay barcos con fondo de cristal, la mejor opción para los que prefieran ver el reino submarino sin mojarse. 3. Haz un safari por el desierto y visita un campamento beduino El Sáhara está a tiro de piedra de Hurghada, y la mejor forma de descubrir su inmensidad es haciendo un safari. Puedes hacerlo en buggy, en quad, en todoterreno... ¡tú eliges! Las colinas al oeste de la ciudad son el escenario perfecto para disfrutar de estas emocionantes actividades. Muchos tours incluyen paradas en campamentos beduinos para tomar el té y, ¿quién sabe?, quizás tengas la oportunidad de conocer a los miembros de las tribus nómadas que llevan siglos recorriendo el desierto. 4. Viaja al antiguo Egipto en Lúxor Considerado el mayor museo al aire libre del mundo, Lúxor es una visita imprescindible en Egipto, por lo que no es de extrañar que las excursiones desde Hurghada sean tan populares. Y su ubicación, a orillas del Nilo, es la guinda del pastel. Entre las atracciones más populares de Lúxor se encuentran algunos de los tesoros más preciados del antiguo Egipto. El Templo Funerario de Hatshepsut, el Valle de los Reyes, el Templo de Karnak, los Colosos de Memnón, el Valle de los Nobles o el Templo de Lúxor son algunos de los lugares más destacados. Si quieres hacerte una idea de las riquezas descubiertas por los arqueólogos en la zona, el Museo de Lúxor alberga una insuperable colección de objetos. 5. Relájate en un baño turco Egipto estuvo bajo control otomano durante tres siglos, y uno de sus mayores legados sigue siendo muy popular hoy en día. El hammam, también conocido como baño turco, es un elemento cultural muy importante en muchas comunidades, un punto de encuentro o un lugar para «alejarse de todo». Baños de vapor, saunas, hidromasajes y masajes son solo algunas de las experiencias relajantes que podrás disfrutar en estos establecimientos. 6. Haz una excursión en barco a las Islas Giftun Si hay un lugar que merece ser llamado «paraíso» son las tres islas del archipiélago de Giftun. Estos islotes cubiertos de arena, que flotan en aguas poco profundas y transparentes muy cerca de Hurghada, son un destino ideal para hacer una excursión de un día. Durante tu visita, puedes descansar en la playa o tomar una copa en uno de los quioscos con techo de caña. O, mejor aún, ponte la máscara de buceo y explora los espectaculares arrecifes de coral y su rica vida marina.