La Capilla Real de Granada es uno de los lugares de interés más importantes de la ciudad. Anexada a la catedral de Santa María de la Encarnación, la capilla alberga los restos mortales de los Reyes Católicos. Don Fernando de Aragón y doña Isabel de Castilla ordenaron su construcción en 1504, y un año después comenzó a levantarse el templo. El arquitecto encargado inicialmente de la obra fue Enrique Egas, que la concibió en estilo gótico.

El mausoleo de los Reyes Católicos es obra de Domenico Fancelli, mientras que en los de su hija y marido (doña Juana I y don Felipe I), además de Fancelli, colaboraron Bartolomé Ordóñez y Pietro Carona. Estos sepulcros son, en realidad, monumentos conmemorativos, ya que los restos mortales se encuentran en los féretros reales situados en la cripta.

El gran retablo mayor está considerado uno de los primeros retablos platerescos de España y su iconografía se articula en torno a tres ejes temáticos principales: unidad religiosa, política y territorial.

Destacan también la Reja Mayor, obra del maestro Bartolomé, y las rejas renacentistas que cierran las capillas de la Santa Cruz y San Ildefonso.

Uno de los lugares más populares durante los recorridos guiados por la Capilla Real es la Sacristía-Museo, que alberga el legado de los Reyes Católicos. Aquí pueden verse desde piezas de orfebrería y libros de la reina hasta una importante colección de pintura. Los visitantes pueden admirar de cerca la corona y el cetro de Isabel la Católica, varias tablas flamencas (incluyendo obras de Hans Memling) e incluso pinturas de Sandro Botticelli y Pietro Perugino.

Es posible visitar la Capilla Real todos los días, excepto el Viernes Santo, el 25 de diciembre y el 1 de enero. El horario de visitas de lunes a sábado es de 10:15 a 18:30, y los domingos y festivos de 11:00 a 18:00.