Con este recorrido disfrutarás de fantásticos paisajes, tiempo en la playa y una pizca de historia medieval.
Al principio navegarás entre acantilados y cuevas antes de atracar en la isla Imeri Gramvousa. Este enorme trozo de roca, que alguna vez fue un escondite de piratas, está coronado por un fuerte veneciano medio en ruinas. Allí podrás quedarte tomando el sol en cubierta, nadar o caminar hasta el castillo para disfrutar de las magníficas vistas. A continuación, el barco regresará a Tigani, en la península. Bañada por las aguas color turquesa fluorescente de la laguna de Balos, es una playa que parece sacada del Caribe.